Home / Archived For octubre 2015
domingo, 11 de octubre de 2015
sábado, 10 de octubre de 2015
CRONOLOGÍA DE SUS OBRAS ( JAIRO ANIBAL NIÑO)
CRONOLOGÍA DE LAS OBRAS JAIRO ANIBAL NIÑO.
- 1966: El monte calvo
- 1969: Las bodas de lata o el baile de los arzobispos
- 1975: Los inquilinos de la ira
- 1977: Zoro
- 1977: El sol subterráneo
- 1977: Puro pueblo
- 1979: La madriguera
- 1979: Toda la vida
- 1981: El manantial de las fieras
- 1983: Dalia y Zazir
- 1985: De las alas caracolí
- 1986: La alegría de querer: poemas de amor para niños
- 1989: Preguntario: poemario para niños
- 1990: Aviador Santiago
- 1991: El quinto viaje
- 1991: Razzgo, Indo y Zaz
- 1991: El músico del aire
- 1992: El árbol de los anhelos : relato para niños de la constitución política de Colombia 1991
- 1992: El nido más bello del mundo
- 1992: Uvaldino y la cafetera maravillosa
- 1992: La estrella de papel
- 1992: El obrero de la alegría
- 1993: Los papeles de Miguela
- 1993: El cuenta distancias
- 1993: La señora Contraria.
EL ZORO (JAIRO ANIBAL NIÑO)
RESUMEN DEL CUENTO EL ZORO
Zoro narra la historia de un niño de la selva que, en compañía de un anciano negro y un ave tente, busca a su pueblo en un viaje lleno de aventuras. A lo largo de su recorrido encuentra un tigre de cristal que canta, pasa por un bosque de animales y se hace amigo de un águila de hielo,también lo secuestra uno mineros de diamantes, y gracias a su esfuerzo, llega a su destino.
COMENTARIO
En zoro se refleja la historia de muchas personas con poco recurso o por que el gobierno no les brinda la protección necesaria y por eso se comete el desplazamiento forzado por quienes tienen el dinero y el poder. En este libro tiene una buena parte de fantasía y por medio de los personajes de fantasía el niño pudo encontrase con su familia después de que se había extraviado y superar cualquier obstáculo hasta la esclavitud. Este texto es muy interesante porque de este se aprende mucho y también algunas personas se sienten identificadas con la historia de zoro.
POEMA EL DIA DE TU SANTO (JAIRO ANIBAL NIÑO)
EL DÍA DE TU SANTO
El día de tu santo
te hicieron regalos muy valiosos:
un perfume extranjero, una sortija,
un lapicero de oro, unos patines,
unos tenis Nike y una bicicleta.
Yo solamente te pude traer,
En una caja antigua de color rapé,
un montón de semillas de naranjo,
de pino, de cedro, de araucaria,
de bellísima, de caobo y de amarillo.
Esas semillas son pacientes
y esperan su lugar y su tiempo.
Yo no tenía dinero para comprarte algo lujoso.
Yo simplemente quise regalarte un bosque.
PREMIOS OTORGADOS POR JAIRO ANIBAL NIÑO
PREMIOS
- 1966: obtuvo el primer premio en el I festival Nacional de Teatro Universitario con la obra El monte calvo.
- 1967: la misma obra recibió el premio al mejor espectáculo libre del V Festival Mundial de Teatro de Nancy (Francia).
- 1968: gana el Concurso para Autores de Teatro.
- 1968: gana el II festival Nacional Universitario con la obra las Bodas de lata.
- 1977: obtiene el primer premio nacional de literatura infantil Enka.
- 1986: La alegría de querer galardonado con el premio Misael Valentino en La Habana (Cuba).
- 1992: preguntario exaltado a la lista de honor de la Organización Internacional para el libro juvenil.
- 1993: en España le fue otorgado el premio Cuchillo Canario de Narración.
- 1996: en México. Consiguió el premio Caracol al mérito.
miércoles, 7 de octubre de 2015
LA GICONDA ( Jairo Aníbal Niño)
LA GIOCONDA
Una vez en Barranquilla existió un hombre que dedicó su vida a estudiar el fenómeno de la sonrisa de la Gioconda.
Luego de muchos años de estudio e investigaciones, descubrió que Leonardo no pintó sobre el rostro de la mujer ninguna sonrisa. De su pincel surgió un rostro adusto con ojos del dulce color de las nubes del vino. Es el espectador quien al mirarla y quererla sonríe primero. Ella lo hace después.
DOS HERMANOS, Cuento (Jairo Aníbal Niño)
En una de las islas danesas, cubierta de sembrados entre los que se elevan antiguos anfiteatros, y de hayedos con corpulentos árboles, hay una pequeña ciudad de bajas casas techadas de tejas rojas. En el hogar de una de aquellas casas se elaboran cosas maravillosas; hierbas diversas y raras eran hervidas en vasos, mezcladas y destiladas, y trituradas en morteros. Un hombre de avanzada edad cuidaba de todo ello.
-Hay que atender siempre a lo justo -decía-; sí, a lo justo, lo debido; atenerse a la verdad en todas las partes, y no salirse de ella.
En el cuarto de estar, junto al ama de casa, estaban dos de los hijos, pequeños todavía, pero con grandes pensamientos. La madre les había hablado siempre del derecho y la justicia y de la necesidad de no apartarse nunca de la verdad, que era el rostro de Dios en este mundo.
El mayor de los muchachos tenía una expresión resuelta y alegre. Su lectura referida eran libros sobre fenómenos de la Naturaleza, del sol y las estrellas; eran para él los cuentos más bellos. ¡Qué dicha poder salir en viajes de descubrimiento, o inventar el modo de imitar a las aves y lanzarse a volar! Sí, resolver este problema, ahí estaba la cosa. Tenían razón los padres: la verdad es lo que sostiene el mundo.
El hermano menor era más sosegado, siempre absorto en sus libros. Leía la historia de Jacob, que se vestía con una piel de oveja para confundirse con Esaú y quitarle de este modo el derecho de primogenitura; y al leerlo cerraba, airado, el diminuto puño, amenazando al impostor. Cuando se hablaba de tiranos, de la injusticia y la maldad que imperaban en el mundo, le asomaban las lágrimas a los ojos. La idea del derecho, de la verdad que debía vencer y que forzosamente vencería, lo dominaba por entero. Un anochecer, el pequeño estaba ya acostado, pero las cortinas no habían sido aún corridas, y la luz penetraba en la alcoba. Se había llevado el libro con el propósito de terminar la historia de Solón.
Los pensamientos lo transportaron a una distancia inmensa; le pareció como si la cama fuese un barco con las velas desplegadas. ¿Soñaba o qué era aquello? Surcaba las aguas impetuosas, los grandes mares del tiempo, oía la voz de Solón. Inteligible, aunque dicho en lengua extraña, resonaba la divisa danesa: «Con la ley se edifica un país».
El genio de la Humanidad estaba en el humilde cuarto, e, inclinándose sobre el lecho, estampaba un beso en la frente del muchacho: «Hazte fuerte en la fama y fuerte en las luchas de la vida. Con la verdad en el pecho, vuela en busca del país de la verdad».
El hermano mayor no se había acostado aún; asomado a la ventana, contemplaba cómo la niebla se levantaba de los prados. No eran los elfos los que allí bailaban, como le dijera una vieja criada, bien lo sabía él. Eran vapores más cálidos que el aire, y por eso subían. Brilló una estrella fugaz, y en el mismo instante los pensamientos del niño se trasladaron desde los vapores del suelo a las alturas, junto al brillante meteoro. Centelleaban las estrellas en el cielo; habríase dicho que de ellas pendían largos hilos de oro que llegaban hasta la Tierra.
«Levanta el vuelo conmigo», pareció cantar y resonar una voz en el corazón del muchacho. El poderoso genio de las generaciones, más veloz que el ave, que la flecha, que todo lo terreno capaz de volar, lo llevó a los espacios, donde rayos, de estrella a estrella, unían entre sí los cuerpos celestes; nuestra Tierra giraba en el aire tenue, y aparecía una ciudad tras otra. En las esferas se oía: «¿Qué significa cerca y lejos, cuando te eleva el genio poderoso del espíritu?».
Y el niño seguía en la ventana, mirando al exterior, y su hermanito leía en la cama, y su madre, los llamaba por sus nombres:
-¡Anders y Hans Christian!
Dinamarca los conoce.
El mundo conoce a los dos hermanos Örste
BIOGRAFÍA DEL AUTOR (Jairo Aníbal Niño)
Jairo Aníbal Niño
(Moniquirá, Boyacá, 1941 - Bogotá, 2010) Escritor colombiano dedicado fundamentalmente a la literatura infantil y juvenil, campo en el que produjo algunas de las obras más importantes de Latinoamérica, aunque cultivó asimismo la narrativa para adultos, la poesía y, especialmente, el teatro.
Jairo Aníbal Niño
Figura polifacética, tras abandonar los estudios que había iniciado en Bucaramanga se dedicó al dibujo y la pintura, y formó parte del grupo artístico La Mancha. Volcado luego en el teatro, a finales de los 70 fue actor, director y titiritero y se integró en grupos teatrales de protesta y en el Teatro Libre de Bogotá. En sus últimos años ejerció la docencia universitaria y dirigió grupos teatrales universitarios. En 1988 fue nombrado director de la Biblioteca Nacional de Colombia.
Su producción dramática abordó temas relacionados con los conflictos recientes de la sociedad colombiana desde una perspectiva crítica y sarcástica, sirviéndose a menudo de técnicas esperpénticas. Algunas de sus piezas dramáticas, que han sido representadas en diversos países americanos y europeos, son Las bodas de lata o el baile de los arzobispos (1968), El monte calvo (1975), Los inquilinos de la ira (1975), El sol subterráneo (1978), La madriguera (1979) y Efraín González(1980).
En el campo de la literatura infantil y juvenil hay que destacar títulos como Zoro(1977) y De las alas caracolí (1985). Publicó además diversas recopilaciones de relatos breves, como Puro pueblo (1977) y Toda la vida (1979). En 1982 el director colombiano Ramiro Meléndez rodó El manantial de las fieras, basada en un guión de Jairo Anibal Niño.
Jairo Anibal Niño - Te regalé un caracol
Te regalé un caracol el día de tu cumpleaños
Cuando izaste la bandera te obsequie otro de color perla
Una tarde, cuando me di cuenta de que estabas triste,
Te mande con mi hermana un caracol de las islas
Hace algunos días, te deje una pareja de caracoles de rió,
En el interior de tu pupitre.
Ayer estuve en tu casa y te lleve un caracol transparente, tan bello y tan extraño
Que parecía hecho de aire endurecido.
Sin embargo, tu madre se enfureció conmigo
Y grito que jamás quería volver a vernos
Ni a mí ni a los caracoles que te regalo a cada rato
Ella no comprende
Que yo,
Simplemente,
Estaba haciendo una escalera de caracol
Para llegar a ti.
Cuando izaste la bandera te obsequie otro de color perla
Una tarde, cuando me di cuenta de que estabas triste,
Te mande con mi hermana un caracol de las islas
Hace algunos días, te deje una pareja de caracoles de rió,
En el interior de tu pupitre.
Ayer estuve en tu casa y te lleve un caracol transparente, tan bello y tan extraño
Que parecía hecho de aire endurecido.
Sin embargo, tu madre se enfureció conmigo
Y grito que jamás quería volver a vernos
Ni a mí ni a los caracoles que te regalo a cada rato
Ella no comprende
Que yo,
Simplemente,
Estaba haciendo una escalera de caracol
Para llegar a ti.
Jairo Anibal Niño - Después de superar
Después de superar
Treinta y dos miedos y medio
Por fin tuve el valor de acercarme a ti y decirte:
-Buenos días,
Y luego de un silencio que duro medio miedo,
Puede agregar:
-¿verdad, que esta lloviendo mucho últimamente?
Después de superar
Treinta y tres miedos
Por fin tuve el valor de acercarme a ti
Y junto al buenos días
Ofrecerte una bolsa de palomitas de maíz.
Espero que te hayas dado cuenta
De que por lo menos una de las palomitas era mensajera.
Treinta y dos miedos y medio
Por fin tuve el valor de acercarme a ti y decirte:
-Buenos días,
Y luego de un silencio que duro medio miedo,
Puede agregar:
-¿verdad, que esta lloviendo mucho últimamente?
Después de superar
Treinta y tres miedos
Por fin tuve el valor de acercarme a ti
Y junto al buenos días
Ofrecerte una bolsa de palomitas de maíz.
Espero que te hayas dado cuenta
De que por lo menos una de las palomitas era mensajera.
Jairo Anibal Niño - Cómo no me vas a querer
Cómo no me vas a querer
Si soy un bombero heroico
Que acaba de salvar un gato
Al que se le incendiaban
Seis de sus siete vidas
Como no me vas a querer
Si soy el capitán de la nave
Que se posa suavemente
En una América del sur
De un planeta lejano.
Como no me vas a querer
Si acabo de ganar
Por amplio margen
La vuelta a Colombia en bicicleta
Y el tour de Francia,
Y definitivamente
Como no me vas a querer
Si soy capaz de soñar, todos los sueños,
Incluso el más lindo de todos:
Soñar que tú me amas.
Si soy un bombero heroico
Que acaba de salvar un gato
Al que se le incendiaban
Seis de sus siete vidas
Como no me vas a querer
Si soy el capitán de la nave
Que se posa suavemente
En una América del sur
De un planeta lejano.
Como no me vas a querer
Si acabo de ganar
Por amplio margen
La vuelta a Colombia en bicicleta
Y el tour de Francia,
Y definitivamente
Como no me vas a querer
Si soy capaz de soñar, todos los sueños,
Incluso el más lindo de todos:
Soñar que tú me amas.
Jairo Anibal Niño - Por primera vez en mi vida envío una carta
Por primera vez en mi vida envío una carta
Y es para ti.
Cuando la abras veras que contiene una hoja perfumada
En la que no hay nada escrito.
Tengo la esperanza de que sepas quien te la envía
Si recuerdas que el ultimo día de clases
Me confiaste el secreto
De que la flor que más amabas era el jazmín
Por lo blanca
Y por su aroma.
Y es para ti.
Cuando la abras veras que contiene una hoja perfumada
En la que no hay nada escrito.
Tengo la esperanza de que sepas quien te la envía
Si recuerdas que el ultimo día de clases
Me confiaste el secreto
De que la flor que más amabas era el jazmín
Por lo blanca
Y por su aroma.
Jairo Anibal Niño - Hay algo en el cielo
Hay algo en el cielo
Una estrella fugaz que desciende
Como si a un astronauta
Se le hubiera caído una moneda brillante
Del bolsillo de su blue Jean espacial.
Hay algo en el cielo
Es una señal sonora,
Una gallada de campanas,
Una música en tropel,
Una melodía eléctrica,
Un viento cantante;
Es el repiquetear del teléfono
Y, por fin,
Tu voz.
Una estrella fugaz que desciende
Como si a un astronauta
Se le hubiera caído una moneda brillante
Del bolsillo de su blue Jean espacial.
Hay algo en el cielo
Es una señal sonora,
Una gallada de campanas,
Una música en tropel,
Una melodía eléctrica,
Un viento cantante;
Es el repiquetear del teléfono
Y, por fin,
Tu voz.
Jairo Anibal Niño - Desde el día
Desde el dicen que conocí a helena
Puedo hablar con los animales y las cosas
Claro que ellos solo entienden el helenañol,
Ya que de lo único que saben y comprenden
Es del amor que siento por ella.
Mi perro me ha dado muchos consejos,
Lo mismo ha hecho una mesa antigua
Y una jarra de porcelana
Y un libro de cuentos
Y una navaja suiza
Y un ratón blanco
Y un balón numero cinco
Y un disco de manzanero y otro de diana ross.
Desde ayer no se que hacer con un dolor que siento
En lo que debe ser el alma,
Porque cuando le pregunte a la jaula
Si helena me querría para siempre,
No dijo nada,
Permaneció en silencio largo rato,
Hasta que de manera extraña abrió su puerta,
Y dejo escapar al ruiseñor.
Puedo hablar con los animales y las cosas
Claro que ellos solo entienden el helenañol,
Ya que de lo único que saben y comprenden
Es del amor que siento por ella.
Mi perro me ha dado muchos consejos,
Lo mismo ha hecho una mesa antigua
Y una jarra de porcelana
Y un libro de cuentos
Y una navaja suiza
Y un ratón blanco
Y un balón numero cinco
Y un disco de manzanero y otro de diana ross.
Desde ayer no se que hacer con un dolor que siento
En lo que debe ser el alma,
Porque cuando le pregunte a la jaula
Si helena me querría para siempre,
No dijo nada,
Permaneció en silencio largo rato,
Hasta que de manera extraña abrió su puerta,
Y dejo escapar al ruiseñor.
Jairo Anibal Niño - Me contaron
Me contaron que ayer cortaron el árbol
Que crecía frente a tu casa
Para poner, en cambio,
Un aparato de la empresa de teléfonos.
Creo que los alambres se hubieran podido colocar
En las fuertes ramas de tu acacia,
Pero parece que no quisieron correr el riesgo
De que alguien, al levantar el auricular,
Escuchara la voz de un gorrión triste
Que averigua por una flor que desapareció hace días
Y que vestía pétalos morados, cáliz del color de la luna,
Y que se adornaba con un dorado sombrero de polen.
El gorrión ofrece recompensa.
Que crecía frente a tu casa
Para poner, en cambio,
Un aparato de la empresa de teléfonos.
Creo que los alambres se hubieran podido colocar
En las fuertes ramas de tu acacia,
Pero parece que no quisieron correr el riesgo
De que alguien, al levantar el auricular,
Escuchara la voz de un gorrión triste
Que averigua por una flor que desapareció hace días
Y que vestía pétalos morados, cáliz del color de la luna,
Y que se adornaba con un dorado sombrero de polen.
El gorrión ofrece recompensa.
Jairo Anibal Niño - Liliana
Liliana, me contaron
Que prefieres salir con López
Porque el es un niño muy rico,
Propietario de muchas cosas.
Para que lo sepas,
Yo también soy muy rico;
Tan rico que una vez fui dueño
De quince caballos de carreras.
Mateo al verte es increíble pensar
Que alguna vez fuiste dueño
De quince caballos.
Dime… ¿todos ellos corrieron en el hipódromo de la capital?
No, Liliana
Ellos jamás corrieron en el hipódromo.
Lo hacían cerca de isla grande
En el golfo de morrosquillo
Mis quince caballos eran de mar.
Que prefieres salir con López
Porque el es un niño muy rico,
Propietario de muchas cosas.
Para que lo sepas,
Yo también soy muy rico;
Tan rico que una vez fui dueño
De quince caballos de carreras.
Mateo al verte es increíble pensar
Que alguna vez fuiste dueño
De quince caballos.
Dime… ¿todos ellos corrieron en el hipódromo de la capital?
No, Liliana
Ellos jamás corrieron en el hipódromo.
Lo hacían cerca de isla grande
En el golfo de morrosquillo
Mis quince caballos eran de mar.
Jairo Anibal Niño - El aire alrededor
El aire alrededor de
un grano de arena
es la flor amarilla.
El aire alrededor de
un vaso de agua
es la gaviota.
El aire alrededor de
tu risa
es una caja de lápices
de colores.
El aire alrededor de
una gotera en el techo
es el mar.
Con los lápices de colores
voy a dibujarte
y tu vestido será amarillo
como la flor de cayena
y pintaré sobre tu cabeza
una gaviota
y la gaviota estará asomada
a una nube y cantando
y dibujaré también tu risa
que será un arco iris
y el arco iris tendrá una
banderita en el sombrero
y dibujaré mi tristeza que
será una gotera en el techo
y la gotera es el mar con
una isla
y la isla es una ballena
emplumada
y finalmente dibujaré
el aire
y el aire serán las letras
de tu nombre,
ya que cada vez que te
pienso la respiración
me duele
con un dolor bonito
porque tú eres el aire
que respiro.
un grano de arena
es la flor amarilla.
El aire alrededor de
un vaso de agua
es la gaviota.
El aire alrededor de
tu risa
es una caja de lápices
de colores.
El aire alrededor de
una gotera en el techo
es el mar.
Con los lápices de colores
voy a dibujarte
y tu vestido será amarillo
como la flor de cayena
y pintaré sobre tu cabeza
una gaviota
y la gaviota estará asomada
a una nube y cantando
y dibujaré también tu risa
que será un arco iris
y el arco iris tendrá una
banderita en el sombrero
y dibujaré mi tristeza que
será una gotera en el techo
y la gotera es el mar con
una isla
y la isla es una ballena
emplumada
y finalmente dibujaré
el aire
y el aire serán las letras
de tu nombre,
ya que cada vez que te
pienso la respiración
me duele
con un dolor bonito
porque tú eres el aire
que respiro.
Jairo Anibal Niño - El enemigo verdadero
Un día me encontré cara a cara con un tigre y supe que era inofensivo.
En otra ocasión tropecé con una serpiente cascabel y se limitó a hacer sonar las maracas de su cola y a mirarme pacíficamente.
Hace algún tiempo me sorprendió la presencia de una pantera y comprobé que no era peligrosa.
Ayer fui atacado por una gallina, el animal mas sanguinario y feroz que hay sobre la tierra.
Eso fue lo que le dijo el gusanito a sus amigos
En otra ocasión tropecé con una serpiente cascabel y se limitó a hacer sonar las maracas de su cola y a mirarme pacíficamente.
Hace algún tiempo me sorprendió la presencia de una pantera y comprobé que no era peligrosa.
Ayer fui atacado por una gallina, el animal mas sanguinario y feroz que hay sobre la tierra.
Eso fue lo que le dijo el gusanito a sus amigos
Jairo Anibal Niño - La Madre
El hombre bebió con avidez esa sopa tibia y espesa que le daba la madre y sintió cómo le volvía otra vez la vida al cuerpo. Hacía varios días que no probaba bocado y había sentido el yerto terror de que no se estaba muriendo de la herida de bala sino del hambre. Era un milagro que ella hubiera encontrado algo para comer en ese paisaje de pedregales.
La mujer después de darle de comer se recostó en una piedra que tenía forma de medialuna. El hombre se sorprendió al verla tan pálida y con las vistas como con fiebre. Quiso acercarse a ella pero la mujer lo detuvo con una señal de los ojos y dijo: “Me dejaría de llamar Emilia Sierra si dejara morir de hambre a mi hijo. No lo he parido ni lo he criado para que se acabe como un perro. Ese gusto no se lo voy a dar a los asesinos del gobierno”.
Arriba surgió un punto luminoso. Era un avión volando tan alto que parecía una pelusa desprendida del sol.
La mujer se quedó mirando el avión hasta que se fue del cielo y agregó: “A usted lo necesitan los pobres de estas tierras para que siga la pelea hasta el final. Cuídese mucho. Ya ve que en un pequeño descuido la tropa nos inundó el rancho y tuvimos que agarrar lo primero que topamos a mano y salir en estampida inventando caminos. Ahora regrese y siga al frente de nuestra gente. Me saluda a su tío Florentino y le dice que le entregue los dos caballos. Y dígale a Margarita que se meta con ustedes en el monte.”
Los ojos de la mujer se llenaron de lágrimas. Contempló amorosamente a su hijo y sonrió. Luego, poco a poco, se fue muriendo sobre la piedra en forma de medialuna.
El hombre observó la cara transparente de la finada y luego vio la olla de peltre donde había hervido la sopa de color rojo, y vislumbró las dos profundas heridas que tenía la madre en las muñecas.
La mujer después de darle de comer se recostó en una piedra que tenía forma de medialuna. El hombre se sorprendió al verla tan pálida y con las vistas como con fiebre. Quiso acercarse a ella pero la mujer lo detuvo con una señal de los ojos y dijo: “Me dejaría de llamar Emilia Sierra si dejara morir de hambre a mi hijo. No lo he parido ni lo he criado para que se acabe como un perro. Ese gusto no se lo voy a dar a los asesinos del gobierno”.
Arriba surgió un punto luminoso. Era un avión volando tan alto que parecía una pelusa desprendida del sol.
La mujer se quedó mirando el avión hasta que se fue del cielo y agregó: “A usted lo necesitan los pobres de estas tierras para que siga la pelea hasta el final. Cuídese mucho. Ya ve que en un pequeño descuido la tropa nos inundó el rancho y tuvimos que agarrar lo primero que topamos a mano y salir en estampida inventando caminos. Ahora regrese y siga al frente de nuestra gente. Me saluda a su tío Florentino y le dice que le entregue los dos caballos. Y dígale a Margarita que se meta con ustedes en el monte.”
Los ojos de la mujer se llenaron de lágrimas. Contempló amorosamente a su hijo y sonrió. Luego, poco a poco, se fue muriendo sobre la piedra en forma de medialuna.
El hombre observó la cara transparente de la finada y luego vio la olla de peltre donde había hervido la sopa de color rojo, y vislumbró las dos profundas heridas que tenía la madre en las muñecas.
Jairo Anibal Niño - Lección de música
Do,
re,
mi,
fa,
sol,
la,
si.
Si?
Sí,
mi
sol;
sí.
Aquel hombre creía que todo se vendía y que todo se compraba. un día su esposa le dio un hijo y el hombre esperó con impaciencia a que el tiempo le diera al niño la capacidad de pedirle muchas cosas y a él la satisfacción de enseñarle a negociar todos y cada uno de sus antojos.
Llegado el momento, el hombre lo invitó a que le presentara la lista de solicitudes. el niño pidió el telón de los atradeceres, la clave de sol, un aerolito, las cosquillas que sintieron en la boca de los estómagos los astronautas que descendieron por primera vez en las praderas de la luna, el bosque de los abrazos, un curso de idiomas para saber qué dicen el baile de las colas de los perros, las lenguas de agua que murmuran en los troncos de los árboles y las palabras fosforecentes que cantan en los ojos de los gatos, la corriente eléctrica generada por los besos, un ratón de computador que le enseñe a evitar las ratoneras de las respuestas y que en cambio lo conduzca siempre al queso de las preguntas, y un poco del sonido del mar con la posibilidad de colocarlo en el interior de una concha de caracol. El hombre no supo qué hacer porque esas cosas no las vendían en ninguna parte.
Su mujer, entonces, lo llevó de la mano al almacén de la infancia.
re,
mi,
fa,
sol,
la,
si.
Si?
Sí,
mi
sol;
sí.
Aquel hombre creía que todo se vendía y que todo se compraba. un día su esposa le dio un hijo y el hombre esperó con impaciencia a que el tiempo le diera al niño la capacidad de pedirle muchas cosas y a él la satisfacción de enseñarle a negociar todos y cada uno de sus antojos.
Llegado el momento, el hombre lo invitó a que le presentara la lista de solicitudes. el niño pidió el telón de los atradeceres, la clave de sol, un aerolito, las cosquillas que sintieron en la boca de los estómagos los astronautas que descendieron por primera vez en las praderas de la luna, el bosque de los abrazos, un curso de idiomas para saber qué dicen el baile de las colas de los perros, las lenguas de agua que murmuran en los troncos de los árboles y las palabras fosforecentes que cantan en los ojos de los gatos, la corriente eléctrica generada por los besos, un ratón de computador que le enseñe a evitar las ratoneras de las respuestas y que en cambio lo conduzca siempre al queso de las preguntas, y un poco del sonido del mar con la posibilidad de colocarlo en el interior de una concha de caracol. El hombre no supo qué hacer porque esas cosas no las vendían en ninguna parte.
Su mujer, entonces, lo llevó de la mano al almacén de la infancia.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Lista de nombres
Con la tecnología de Blogger.
-
No busques mas tu cuaderno de geografía. Yo lo saqué de tu morral. No quisiste ir a matiné conmigo, el domingo pasado. Mis amigos me con...
-
Hay algo en el cielo Una estrella fugaz que desciende Como si a un astronauta Se le hubiera caído una moneda brillante Del bolsillo ...
-
Tu cabello es una bandada de chupaflores, Tu cara es un espejo mágico, Tu sonrisa es un gol olímpico, Tu mirada es un cinco en algebra...
-
EL DÍA DE TU SANTO El día de tu santo te hicieron regalos muy valiosos: un perfume extranjero, una sortija, un lapic...
-
Me contaron que ayer cortaron el árbol Que crecía frente a tu casa Para poner, en cambio, Un aparato de la empresa de teléfonos. Cre...
-
Do, re, mi, fa, sol, la, si. Si? Sí, mi sol; sí. Aquel hombre creía que todo se vendía y que todo se compraba. un día su esposa...
-
Cuando pasas, se cae un cuaderno un pie tropieza, se escurren unos anteojos, se oprime una garganta, un par de manos sudan, se extra...
-
¿Sabes qué? Esta noche, asomado a la ventana veo la luna como si fuera el ojo de una cerradura. ¿Y sabes qué? Me empino en la punta...
-
El hombre bebió con avidez esa sopa tibia y espesa que le daba la madre y sintió cómo le volvía otra vez la vida al cuerpo. Hacía varios día...
-
Colombia Limita al norte con el mar caribe, Al sur con ecuador y Perú Al noroeste con la republica de Panamá Al oriente con Venez...
Archivo del blog
-
▼
2015
(73)
-
▼
octubre
(46)
- JAIRO ANIBAL NIÑO - ¿SI LOS ENAMORADOS VIVIERAN EN...
- CRONOLOGÍA DE SUS OBRAS ( JAIRO ANIBAL NIÑO)
- EL ZORO (JAIRO ANIBAL NIÑO)
- POEMA EL DIA DE TU SANTO (JAIRO ANIBAL NIÑO)
- PREMIOS OTORGADOS POR JAIRO ANIBAL NIÑO
- LA GICONDA ( Jairo Aníbal Niño)
- Jairo Anibal Niño - Colombia
- FRASES CÉLEBRES (Jairo Aníbal Niño)
- CUENTO CORTO (Jairo Aníbal Niño)
- MICRORRELATO (Jairo Aníbal Niño)
- DOS HERMANOS, Cuento (Jairo Aníbal Niño)
- LIBROS DE JAIRO ANÍBAL NIÑO (Jairo Aníbal Niño)
- BIOGRAFÍA DEL AUTOR (Jairo Aníbal Niño)
- Jairo Anibal Niño - Si María
- Jairo Anibal Niño - Te regalé un caracol
- Jairo Anibal Niño - Después de superar
- Jairo Anibal Niño - ¿Qué es lo que siento?
- Jairo Anibal Niño - Por ti
- Jairo Anibal Niño - Cómo no me vas a querer
- Jairo Anibal Niño - Me dijiste
- Jairo Anibal Niño - Miro la luna llena
- Jairo Anibal Niño - En secreto
- Jairo Anibal Niño - Por primera vez en mi vida env...
- Jairo Anibal Niño - Todos trasnocharon
- Jairo Anibal Niño - Es tan azul tu sombra
- Jairo Anibal Niño - Hay algo en el cielo
- Jairo Anibal Niño - Estabas bajo el árbol
- Jairo Anibal Niño - Tu cabello es una bandada de c...
- Jairo Anibal Niño - Es medianoche
- Jairo Anibal Niño - La imagen
- Jairo Anibal Niño - Tres nubes grises
- Jairo Anibal Niño - Desde el día
- Jairo Anibal Niño - Me contaron
- Jairo Anibal Niño - Cuando apoyo mi oído
- Jairo Anibal Niño - Te has ido
- Jairo Anibal Niño - ¿1x1?
- Jairo Anibal Niño - Liliana
- Jairo Anibal Niño - Está lloviznando
- Jairo Anibal Niño - El aire alrededor
- Jairo Anibal Niño - El enemigo verdadero
- Jairo Anibal Niño - Me haces un favor
- Jairo Anibal Niño - La Madre
- Jairo Anibal Niño - Lección de música
- Jairo Anibal Niño - ¿Cómo pasa al otro lado del es...
- Jairo Anibal Niño - ¿Qué es el buho?
- Ayer por primera vez (Jairo Anibal Niño)
- ► septiembre (27)
-
▼
octubre
(46)